En el Sindicato de la Fundación Brazos Abiertos, Ana María Moya, Nancy Saavedra y Jéssica Briones dirigen la única organización sindical de esta institución Católica de derecho civil sin fines de lucro, fundada en 2004 por el Arzobispado de Santiago, perteneciente a la Red Integra y dependiente de la Vicaría para la Educación.
Gracias a su gestión, a lo largo de los tres años que llevan liderando la organización sindical han logrado incrementar considerablemente la cifra de afiliadas y se preparan para una negociación colectiva a fin de año, donde se enfocarán -a través de sus demandas-, a mejorar las remuneraciones de sus socias y velar por el correcto cumplimiento de sus derechos laborales.
Ana María Moya (Presidenta), Nancy Saavedra (Secretaria) y Jéssica Briones (Tesorera)- Auxiliar de Aseo, Auxiliar de Servicios y Agente Educativa de Nivel Medio Menor, respectivamente- lideran el sindicato de la Fundación Brazos Abiertos, organización que abarca a 12 jardines infantiles en su totalidad. Gracias a la motivación y perseverancia que las caracteriza llevan varios años de árduo trabajo unidas por diversas causas comunes: mejorar la unidad de la agrupación y crecer en conocimiento, recuperar la confianza de las socias, llegar a acuerdo con su empleador y generar una mayor integración de las funcionarias.
A pesar de que la emergencia sanitaria sigue afectando a nuestro país y aún no da tregua, a fines de este 2021 el sindicato de la Fundación Brazos Abiertos se enfrentará a la segunda negociación colectiva de su historia, la cual será una instancia clave para exponer las demandas establecidas, las cuales apuntan a mejorar la situación laboral de todos sus socias en materia de remuneraciones, beneficios (bonos, días administrativos, entre otros), y una mayor participación del sindicato como aporte a la empresa y a las buenas relaciones laborales con el empleador.
ENFOCADAS EN DEFENDER LOS DERECHOS DE LAS TRABAJADORAS
Jessica Susana Briones Ríos trabaja desde el año 2007 en la Fundación. En el año 2009 fundó el Sindicato, convirtiéndose así en la más antigua de la agrupación, con 12 años en experiencia sindical. A su juicio, uno de los principales obstáculos que han debido manejar durante la emergencia sanitaria es el escaso contacto que han tenido con los niños, quienes se han visto afectados por la falta de aprendizajes educativos y la falta de convivencia con sus pares, pero también la falta de apoyo de las mismas colegas y educadoras, que junto con el temor que existe de perder la fuente laboral por unirse al sindicato, han sido temas delicados a lo largo de estos años. Sin embargo, asegura que a pesar de esto la agrupación ha tenido un crecimiento sostenido a lo largo del tiempo y que gracias a las nuevas socias se han fortalecido mucho más.
Nancy Saavedra, actual secretaria de la agrupación y Auxiliar de Servicio en la Fundación Brazos Abiertos desde hace ya 11 años, se integró al sindicato en agosto del año 2019 y declara que, según su experiencia, las dificultades que han tenido que enfrentar es la comunicación que tienen tanto con su empleador como con sus propias afiliadas. Sin embargo y a pesar de esto, recalca que el sindicato comenzó este año con con 79 socias y actualmente tiene 105, resultado del compromiso y perseverancia que ha tenido la directiva.
Frente al contexto de pandemia actual, Nancy Saavedra es enfática en señalar que lo más difícil ha sido la falta de materiales de seguridad anti covid para las socias del Sindicato. Si bien no han presentado problemas con los niños, asegura que “Como fundación no cumplen protocolos hacia las trabajadoras ni tratos con el sindicato”.
Según la Presidenta del sindicato, Ana Maria Moya Gonzalez (quien trabaja hace cinco años en la Fundación como auxiliar de Aseo), la directiva de la cual es parte es empeñosa, arriesgada , jugada , honesta y trabajadora, por sobre todo. “Como mujer me encanta estar en una directiva así, ya que aparte de ayudar al resto es impactante cómo uno empieza a ver la real situación interna”, afirma respecto a su experiencia en el sindicato.
Al igual que sus compañeras de directiva, señala que la desconfianza, el descontento y la credibilidad de parte de las socias hacia la agrupación sindical han sido los principales factores por los cuales desean revertir y mejorar la situación actual, aunque enfatiza que esto es una de las consecuencias derivada de las malas experiencias que vivió la anterior directiva, quienes quedaron a la deriva en plena negociación colectiva al perder el apoyo de la Central Autónoma de Trabajadores de Chile (CAT), factor que afectó en su desempeño . A pesar de esto, asume que los principales objetivos que tienen a futuro son seguir mejorando en unidad y creciendo en conocimiento, pero principalmente, aumentar los salarios de las socias.
Conscientes de los múltiples desafíos que tienen a futuro y con el objetivo de mejorar los conflictos internos, aprender y perfeccionarse más en materias sindicales, las tres dirigentas tomaron la decisión de unirse a Feseduca. “Nos proporcionan una excelente asesoria y las herramientas para ser una mejor directiva y crecer como sindicato”, afirma Nancy Saavedra. Por su parte, Jessica Briones asegura que esta determinación la tomaron por “La trayectoria y el conocimiento en los ámbitos educacionales” de la Federación y que han sido beneficiadas “Con el apoyo legal y la información como apoyo a esta crisis”. La opinión de la Presidenta del sindicato también coincide con la de sus compañeras: “El proyecto que nos presentó Feseduca está muy bien ejecutado y las herramientas adquiridas a través de cada gestión nos ayudan a pulir cada vez más y mejorar nuestro sindicato. Por eso tomamos la decisión de unirnos a Feseduca, para buscar asesorías, estrategias y capacitaciones sindicales, además de compartir experiencias con otras agrupaciones asociadas”, finaliza. Esta agrupación es, actualmente, el primer y único sindicato de jardines infantiles que es parte de la Federación de Sindicatos deIinstituciones de Educación (FESEDUCA).
Felicitaciones Nancy, Jessica y Ana, sigamos adelante.